En la educación británica, el currículo es amplio y diverso. Los estudiantes tienen la oportunidad de estudiar una amplia variedad de materias, incluyendo arte, música, tecnología y educación física. También hay una mayor flexibilidad en la elección de materias en la educación postobligatoria. En la educación española, el currículo es más estructurado y enfocado en materias académicas. Los estudiantes tienen menos oportunidades de estudiar materias optativas y hay una mayor presión para obtener resultados académicos. En conclusión, hay diferencias significativas entre la metodología de enseñanza en la educación británica y en la educación española. Ambos sistemas tienen fortalezas y debilidades, y es importante reconocer estas diferencias para entender mejor cómo se enseña en cada país.