Cada día estamos más familiarizados con el término Inteligencia Artificial (IA) e incluso muchos de nosotros la utilizamos en nuestro día a día. Uno de los aspectos que más preocupan a padres y profesores es la sustitución del pensamiento crítico de los jóvenes por información producida por herramientas de Inteligencia Artificial (IA), cuyo uso se ha generalizado en las aulas. Y es que desde la automatización de procesos en las fábricas hasta los asistentes virtuales en nuestros teléfonos móviles, la IA ha cambiado la forma en la que interactuamos con la tecnología y ha transformado muchos aspectos de nuestra vida cotidiana, como la educación.
La IA ya no es un campo de la informática desconocido para el público en general, sino que una gran parte de la población ya conoce la gran capacidad de la IA para realizar tareas que normalmente requerían la inteligencia humana, como el aprendizaje, la resolución de problemas y la toma de decisiones. Los sistemas de IA, además, pueden aprender la experiencia, mejorar con el tiempo y adaptarse a nuevas situaciones, lo que convierte a la Inteligencia Artificial en una gran herramienta de ayuda – o amenaza, según otros – para los retos de la vida diaria tamién de nuestros estudiantes.
Ventajas del uso de la IA en el aula
En el ámbito educativo, la IA también ha comenzado a desempeñar un papel importante, y no son pocos los profesores y alumnos que hacen uso de ella en el aula.
Los asistentes virtuales basados en IA proporcionan respuestas rápidas a preguntas de los estudiantes ayudan a los profesores en la gestión de las tareas administrativas. La IA también puede adaptarse a las necesidades de aprendizaje de cada estudiante y monitorear su progreso académico; a la vez que es capaz de proporcionar recursos y actividades específicas para ayudar a cada alumno a mejorar su comprensión y habilidades de forma individualizada y en función de sus propias fortalezas y debilidades. La evaluación automatizada también resulta útil a la hora de evaluar el trabajo de los alumnos de manera eficiente y objetiva, permitiendo a los profesores centrarse en proporcionar feedback y apoyo a los alumnos. Por último, la IA también puede resultar de gran ayuda a la hora de llevar a cabo investigación y análisis en el ámbito académico mediante la recopilación y el análisis de grandes cantidades de datos, facilitando la toma de decisiones bien informadas y personalizada en materia de aprendizaje y enseñanza.
En otras palabras, la IA puede ser una herramienta muy valiosa en el aula de cara a mejorar la eficiencia, incrementar la personalización y la calidad del proceso de aprendizaje y aportando un gran valor añadido a la educación.
Problemas generados por el mal uso de la IA entre los estudiantes
Sin embargo, un mal uso de las herramientas de IA por parte de los alumnos puede impedirles aprender de forma efectiva en lugar apoyar proceso de aprendizaje.
Las herramientas de generación de texto automático pueden ser utilizadas para copiar y pegar información directamente de internet o de otros recursos, además de que los estudiantes pueden llegar a plagiar contenido copiando y pegando información de otros idiomas y haciéndola pasar como propia si no citan adecuadamente a sus autores. El hecho de que la fuente de la que proviene la información que genera la IA pueda llegar a ser desconocida o poco fiable hace que no todo el contenido que generan estas herramientas sea de calidad. Sin duda alguna, uno de los aspectos que más preocupan a padres y profesores en cuanto al uso de IA es la sustitución del pensamiento crítico por información producida por herramientas de IA si los propios estudiantes comienzan a depender demasiado de ellas para la resolución de problemas en lugar de tratar de resolverlos por sí mismos. Incluso yendo un paso más allá, este tipo de herramientas puede llegar a perpetuar prejuicios y discriminación si los estudiantes no tienen en cuenta la calidad de los datos, su nivel de inclusión y la diversidad.
¿Qué sucederá en el futuro? ¿Llegarán las herramientas de IA a ser una ayuda real para los estudiantes o prevalecerán como una amenaza del propio pensamiento crítico, abocando a la juventud a un pensamiento de rebaño?
Soluciones a problemas generados por el mal uso de la IA en el aula
En vistas de la gran preocupación que el uso de herramientas de IA está generando tanto en padres como en profesores, ya existen algunos centros educativos que no buscan escapar del uso de la IA, sino que, por el contrario, están comenzando a implementarla con la intención de mejorar los resultados de sus alumnos y de hacer más eficiente el proceso de enseñanza en sus centros.
TutorASAP High Performance Study Centre es uno de estos centros pioneros en la capital madrileña. Esta academia de alto rendimiento dirigida principalmente a estudiantes internacionales, ya está ofreciendo charlas formativas gratuitas dirigidas a padres de alumnos sobre cómo la IA está ayudando en la aportación de valor y cómo pueden los padres y profesores valerse de ellas para ayudar a que el rendimiento académico de sus hijos se vea beneficiado por este tipo de herramientas. Estas sesiones informativas ayudan a disminuir las dudas y preocupaciones de los padres frente a las herramientas que a día de hoy se consideran una gran amenaza para la educación.
También en Madrid se encuentran otros centros que buscan atajar el problema de uso indebido de la IA desde una perspectiva diferente. Limitless Minds International College o THP International College – centros de educación británica y educación internacional respectivamente – ya han incluido en su currículum cursos específicos dirigidos a alumnos de secundaria donde se enseña a los propios alumnos a hacer un uso adecuado de las herramientas de IA, poniendo el foco en el aprendizaje efectivo y en la aplicación de herramientas de generación automática de contenido a las materias estudiadas en las últimas etapas de educación secundaria. Estos cursos están adaptados a la edad y conocimientos previos de los adolescentes y se complementan con actividades prácticas y ejemplos concretos para que los estudiantes sean capaces de aplicar lo aprendido y experimentar con la IA de una manera eficiente, segura y ética.
En definitiva, ahora nos corresponde a los centros educativos adaptarnos a los nuevos tiempos y, no solo hacer una buena práctica de las herramientas de IA, sino también educar en estas buenas prácticas a nuestros alumnos para que sean capaces de sacarles el rendimiento al gran potencial que presentan. ¿Y tú, querido lector? ¿De qué otras formas crees que deben los centros educativos adaptarse al uso de estas nuevas herramientas en el aula?
